Hace un par de años que Austria fue identificada como uno de los centros más importantes de Europa para el tráfico de armas por la Iniciativa Global contra el Crimen Organizado Transnacional, la situación de aquel país fue aprovechada por una de las organizaciones criminales más grande del mundo, el Cártel de Sinaloa, que adquirió más de mil armas pagando no solo con dinero, sino también con una de las drogas que produce en la actualidad: el fentanilo.
En su lucha contra la droga sintética que tiene a Estados Unidos sumergido en una crisis de adicciones y muertes por sobredosis, la DEA se infiltró al cártel dirigido por Ismael “El Mayo” Zambada y los hijos de Joaquín “El Chapo” Guzmán, pudiendo constatar la transacción entre la organización criminal y los traficantes de armas austriacos, detalló el diario Milenio.
Fue entre el 14 y 15 de diciembre cuando un operador de una célula del Cártel de Sinaloa, identificado como Anastacio Soto Vega, alías “Tachín”, viajó a Viena, Austria, para adquirir un millar de armas de fuego de alto calibre, así como equipo táctico militar para las operaciones de la organización criminal en México y Estados Unidos.
“Tachín” se reunió con contrabandistas de armas, estos mostraron su arsenal, primero observó los fusiles AK-47, subfusiles y pistolas de mano, pero finalmente se decantó por los AR-15, de los que pidió 500 -algunos con lanzagranadas incluídos- también solicitó 20 granadas, 500 chalecos antibalas y 500 pistolas.
Previamente se había pactado la manera de pagar la mercancía: una parte se haría como se hace comúnmente, con dinero, la otra con un cargamento de fentanilo el cual sería entregado en EE.UU. Así sellaron el tratado y cada parte obtuvo lo que deseaba.
Dos meses después de aquel viaje a Viena, la mercancía pactada llegó y fue entregada en varias partes, todas en Los Ángeles, California. La transacción se hizo a nombre de los hermanos Leobardo y Martín García Corrales, operadores de una célula que trabaja para el Cártel de Sinaloa.
Respecto a las actividades del Cártel de Sinaloa, se obtuvo valiosa información, como una ruta no usada antes, que involucra actividades de Austria a México y a operadores del grupo en Estados Unidos.
Mientras que las operaciones en Austria dejaron al descubierto que el mercado criminal está vinculado con grupos que participan en otras actividades ilícitas, como el narcotráfico y la prostitución.