Una investigación realizada por el Departamento de Trabajo de Estados Unidos descubrió que más de 300 niños, incluidos dos niños de 10 años, trabajaban en restaurantes McDonald’s en Kentucky y otros estados en violación de las leyes laborales federales.
Uno de los casos más impactantes que encontró la investigación fue el de dos niños de 10 años que trabajaban sin recibir pago hasta las 2:00 am en un restaurante McDonald’s en Louisville operado por Bauer Food LLC, según informó departamento en un comunicado de prensa.
Los dos niños preparaban y distribuían pedidos de comida, limpiaban la tienda, trabajaban en la ventana del autoservicio y operaban una caja registradora, según la información recabada por los investigadores.
A uno de los niños también se le permitió operar una freidora, una tarea prohibida para trabajadores menores de 16 años según la ley federal.
La investigación determinó que al menos 305 niños fueron empleados en violación de las leyes laborales federales en 62 ubicaciones de McDonald’s en Kentucky, Indiana, Maryland y Ohio, operadas bajo tres franquicias: Bauer Food LLC, Archways Richwood LLC y Bell Restaurant Group I LLC.
La mayoría de los restaurantes, 45 de los 62, estaban en Kentucky, según datos publicados por el departamento.
Con respecto a los dos niños de 10 años, Bauer Food LLC dijo que supuestamente eran hijos de un gerente nocturno que visitaban a su padre en el trabajo y no estaban aprobados por la gerencia de la organización franquiciada para estar en esa parte del restaurante.
El franquiciado dijo que desde entonces había tomado medidas para garantizar que las políticas con respecto a los niños que visitan a un padre o tutor en el trabajo fueran claras para todos los empleados.
“Estos informes son inaceptables, profundamente preocupantes y van en contra de las altas expectativas que tenemos para toda la marca McDonald’s. No se nos escapa la importante responsabilidad que tenemos de garantizar una experiencia positiva y segura para todos bajo los Arcos”, dijo en un comunicado Tiffanie Boyd, vicepresidenta sénior y directora de personal de McDonald’s USA.
“Sé lo importante que es que cada restaurante fomente una cultura de seguridad. Como madre cuyo hijo adolescente trabajó con orgullo en nuestro McDonald’s local, siento esto a un nivel muy personal. Estamos comprometidos a garantizar que nuestros franquiciados tengan los recursos que necesitan para fomentar lugares de trabajo seguros para todos los empleados y mantener el cumplimiento de todas las leyes laborales”, agregó.
Las tres franquicias enfrentan multas civiles combinadas de $212,754 por las violaciones de trabajo infantil, según el comunicado.
“Con demasiada frecuencia, los empleadores no siguen las leyes de trabajo infantil que protegen a los trabajadores jóvenes. Bajo ninguna circunstancia debe haber un niño de 10 años trabajando en una cocina de comida rápida alrededor de parrillas calientes, hornos y freidoras”, dijo Karen Garnett-Civils, directora de distrito de la división de horas y salarios de la agencia, en un comunicado.