Un alto funcionario chino defendió en una entrevista publicada este sábado por la prensa local que Beijing y Washington están logrando “avances significativos” en la cooperación para el control de drogas como el fentanilo pese a algunas críticas al respecto.
En los últimos meses, delegaciones de ambos países han tejido “mecanismos efectivos” para “atajar la fabricación y el tráfico mundial de fentanilo”, asevera Yu Haibin, subdirector general de la Oficina de Control de Narcóticos del Ministerio de Seguridad Pública, en una entrevista en el diario oficialista Global Times.
No obstante, según la administración de Biden, los cárteles mexicanos fabrican ahora este opioide sintético a partir de precursores químicos que adquieren de China y luego trafican con él en Estados Unidos, país que sufre la peor crisis de opiáceos de su historia.
Así, Washington está buscando la entrada de sustancias de China a Estados Unidos a través de México, algo que Yu refuta: “Los productos químicos tienen una naturaleza dual. Pueden ser utilizados por delincuentes para fabricar drogas, pero lo normal es que se utilice en la producción industrial y la vida cotidiana”.
“La llamada cadena de producción puede ser tanto una cadena de producción de drogas como una farmacéutica o biotecnológica. Ningún país puede codificar ni monitorear productos químicos no controlados. Es como si se sancionase a proveedores de armas para evitar guerras, pero luego también a los productores de acero y posteriormente a los proveedores de hierro”, argumenta.
Yu recuerda que delegaciones de alto nivel de ambos países se han reunido en los últimos meses como parte de uno de los consensos que alcanzaron los presidentes chino y estadounidense, Xi Jinping y Joe Biden, durante la reunión que mantuvieron el año pasado en San Francisco para estabilizar la maltrecha relación bilateral y evitar mayores conflictos.
El funcionario destaca que ambos países han logrado avances para desbaratar la financiación ilícita de redes de organizaciones delictivas transnacionales o clasificar de las drogas sintéticas y sus precursores químicos.
La última reunión que trató este tema tuvo lugar a finales de agosto en Beijing con la participación de Yu, del jefe de la diplomacia china, Wang Yi, y del asesor de seguridad nacional estadounidense, Jake Sullivan.
Yu también participó a finales de julio en Washington en el Grupo de Trabajo Antinarcóticos creado a tal efecto que, según el funcionario, fue “un gran éxito”.
Según el funcionario, la clasificación de sustancias por parte de China “es uno de los logros notables de la cooperación entre los dos países”.
Desde junio, China ha añadido 46 nuevas sustancias psicoactivas a la lista de drogas controladas, lo que supone el aumento más amplio y de mayor envergadura de los últimos años. Además, también ha anunciado controles a tres precursores químicos utilizados en la producción de fentanilo, anota el diario.
Las dos partes también han logrado avances sustanciales “en el intercambio de inteligencia y la colaboración para resolver casos relacionados con transacciones ilegales de divisas”, agrega la publicación.
“El abuso de fentanilo no es un problema en China, pero estamos dispuestos a fortalecer la cooperación siempre que sea sobre la base del respeto mutuo, la igualdad y el beneficio mutuo, de conformidad con las convenciones internacionales y las leyes nacionales”, dice el funcionario en la entrevista.
Estados Unidos ve la lucha contra el fentanilo como su “asunto más vital para la seguridad” de los ciudadanos, según indicó el encargado de América Latina para el Departamento de Estado, Brian Nichols, ante una audiencia en el Congreso el pasado verano.