CANANEA, SONORA.- En relación a la injusta remoción de mi nombramiento como Tesorero municipal el pasado 9 de mayo, el Tribunal Estatal Electoral ha decidido revocar la sesión en la que se llevó a cabo dicho acuerdo en el ayuntamiento de Cananea.
Esta decisión se basa en que dicha sesión extraordinaria se realizó sin cumplir con las normas establecidas, ya que se convocó de manera “urgente” con un único punto en la agenda, sin dar la oportunidad de un correcto cabildeo, y sin proporcionar las pruebas de las acusaciones laborales que se me imputaban. Además, no todos los regidores fueron citados correctamente.
La sesión, aunque se denominó “pública”, se llevó a cabo de manera cerrada, y se negó el acceso con la fuerza pública a la persona que ocupaba el cargo de secretaria de acuerdos, bajo el pretexto de que era afín a mi persona.
A lo largo de este doloroso proceso, fui violentado políticamente y señalado sin pruebas. Es reprobable que hubo políticos y candidatos que usaron este ejercicio abusivo del servicio público para hacer campaña denostando mi persona.
Se utilizó toda la fuerza de la ley para hacerme parecer un delincuente, acusándome sin fundamentos y sin tener ningún motivo concreto más allá de la diferencia de simpatía partidaria.
Esta situación fue evidenciada de manera lamentable en las redes sociales, difamándome con el objetivo de dañar la imagen de la candidata que apoyé abiertamente.
He sido testigo de la peor cara de la política, donde se priorizan los intereses personales y partidistas sobre la verdad y la justicia. Durante este tiempo, mi reputación fue atacada y mi integridad puesta en duda. A pesar de todo, mantuve la esperanza de que la verdad prevalecería.
Es importante resaltar que, hasta la fecha, sigo sin ninguna investigacion o denuncia en la Contraloría por temas relacionados a mi desempeño como Tesorero.
Al contrario, regreso con la noticia de que durante la última auditoría de mi periodo como Tesorero, todo salió perfecto en la auditoría financiera, cuyos resultados serán dados a conocer más adelante por el Instituto Superior de Auditoría y Fiscalización (ISAF), lo cual conlleva mayores recursos para Cananea.
Debido a estos hechos, el Tribunal Electoral se involucró y, tras sus investigaciones, se declaró la existencia de omisiones en la sesión extraordinaria. Esto dejó en claro el uso inadecuado de un cargo público para frenar el derecho a la democracia que nuestro país tanto valora, además de otras irregularidades que ya mencioné.
A pesar de la satisfacción de mi reinstalación, ya no siento que tenga objetivos en común con el actual ayuntamiento. Por esta razón, he decidido renunciar a mi puesto como Tesorero Municipal. Sus objetivos se alejan de mi ética de no mentir, no dañar, no robar y, sobre todo, no traicionar al pueblo.
Agradezco profundamente a quienes me han apoyado y han confiado en mí durante estos momentos de difamación, especialmente a los regidores Benjamín Eduardo Schirrmeister Montoya, Julio César Ramos Lozano, Mario Sánchez Acosta y José Luis Valencia Cota. Su respaldo me ha dado la fortaleza para enfrentar esta difícil etapa y seguir adelante con la frente en alto.
Atentamente,
Edgar Ivan Rodriguez Lopez
Cananea, Sonora a 17 de Julio de 202