De pronto, a plena luz del día, se hace la noche. La poderosa estrella que da calor a todo un Sistema Solar parece apagarse cuando una sombra redonda la oculta por unos minutos.
Eso mismo sucederá mañana al mediodía cuando tenga lugar el mayor evento astronómico catalogado por astrónomos: el eclipse solar total 2024, que ocurre cuando nuestro Sol se encuentra eclipsado completamente por la Luna, desde nuestro punto de vista terráqueo.
Este extraordinario evento podrá verse solo en América del Norte, México, Estados Unidos y Canadá. En ese orden, estos tres países podrán disfrutar del Eclipse de Sol 2024, que promete romper todos los pronósticos de observación, por la cantidad de grandes ciudades que atravesará el fenómeno astronómico y también por su duración, que será de más de 4 minutos.
“Este eclipse solar total implica que el 100% de la luz del Sol será cubierta por la Luna, que pasará entre medio de nuestro planeta y la estrella, dejando ver su corona. Ese suceso nos brindará la oportunidad de ver el Sol, nuestra estrella más cercana, con un nivel de detalle extremadamente único”, explicó la doctora en Ciencias Atmosféricas y Oceánicas, por la Universidad de California (UCLA), en Los Ángeles.
“Lo más interesante de este eclipse es que a diferencia del ocurrido en 2017 en Estados Unidos, cuando nuestra estrella estaba declinando su actividad, en este 2024 la misma se está potenciando, según el ciclo que tiene. Esto hace incrementar sus explosiones y llamaradas. Es un momento en el que la corona solar está mucho más activa, y donde se pueden hacer muchos experimentos de observación más ricos”, precisó la especialista que se unió a la NASA en 2019 como afiliada a la Asociación de Universidades de Investigación Espacial (USRA).
Es que aproximadamente cada 11 años, el campo magnético del Sol cambia, provocando un ciclo de actividad creciente y luego decreciente. Durante el mínimo solar, hay menos erupciones gigantes del Sol, como erupciones solares y eyecciones de masa coronal. Pero durante el máximo solar, el Sol se vuelve más activo.
Así como lo afirmó la experta de la NASA, en 2017 el Sol se acercaba al mínimo solar. Los espectadores del eclipse total pudieron ver la impresionante corona. Pero como el Sol estaba “en silencio”, las llamaradas que fluían hacia la atmósfera solar se restringieron solo a las regiones ecuatoriales de la estrella.
El Sol es más magnéticamente simétrico durante el mínimo solar, lo que provoca esta apariencia más simple. Pero durante el eclipse de 2024, el Sol estará en el máximo solar o cerca de él, cuando el campo magnético se parece más a una “bola de pelo enredada”, según describen los astrónomos.
Es probable que las llamaradas sean visibles durante la corona. Además de eso, los espectadores tendrán más posibilidades de ver protuberancias, que aparecen como rizos o bucles de color rosa brillante que salen del sol. Con suerte, incluso podría existir la posibilidad de ver una eyección de masa coronal (una gran erupción de material solar) durante el eclipse.
Experimentos durante el eclipse
“Este tipo de eclipses, algunos experimentos científicos nos permitirán conocer cómo se comporta la corona solar, cómo cambia el campo magnético del Sol, cómo cambia su masa, y cómo interactúa la atmósfera terrestre durante este evento astronómico. Podremos estudiar los cambios que se genera en la atmósfera de la Tierra en sus distintas capas”, detalló Gallardo-Lacourt.
Los experimentos que hará la NASA durante el eclipse solar total de 2024 y que hace mención Gallardo-Lacourt se basan en las investigaciones realizadas durante el eclipse de 2017.
Los proyectos, dirigidos por investigadores de diferentes instituciones académicas, estudiarán el Sol y su influencia en la Tierra con una variedad de instrumentos, incluidas cámaras a bordo de aviones de investigación de gran altitud, radioaficionados y más.
Además de esos proyectos, los instrumentos que se lanzaron durante el eclipse solar anular de 2023 en tres cohetes sonda se lanzarán nuevamente durante el próximo eclipse solar total.
Desde el eclipse solar de 2017 también se han lanzado dos naves espaciales diseñadas para estudiar la corona solar: la sonda solar Parker de la NASA y la ESA (Agencia Espacial Europea) y el Solar Orbiter de la NASA. Estas misiones proporcionarán información sobre la propia corona, mientras los espectadores en la Tierra la ven con sus propios ojos, brindando una emocionante oportunidad para combinar y comparar puntos de vista.
“Un avión de la NASA recorrerá el camino del eclipse solar y observará cómo disminuye la temperatura atmosférica y otro cambios en la distintas capas”, detalló la experta en ciencias atmosféricas.
El avión será un WB-57 de la NASA que volará con cámaras y espectrómetros (que estudian la composición de la luz) para aprender más sobre la temperatura y la composición química de la corona y las eyecciones de masa coronal, o grandes explosiones de material solar.
Al volar a lo largo de la trayectoria del eclipse, los expertos también esperan extender su tiempo en la sombra de la Luna en más de dos minutos. El equipo espera que estas observaciones proporcionen nuevos conocimientos sobre las estructuras de la corona y las fuentes del flujo constante de partículas emitidas por el Sol, el viento solar.
“También el lanzamiento de tres cohetes a unos 150 km de altura, que miden distintas temperaturas y comportamiento de partículas será importante”, agregó Gallardo-Lacourt.
A partir de los eclipses solares recientes, hay evidencia de la existencia de ondas de gravedad en la estratosfera a medida que se enfría. Al igual que las olas se forman en el océano o en un lago cuando se altera el agua, las ondas de gravedad se forman en la atmósfera terrestre cuando se altera el aire, lo que afecta la aviación y los patrones climáticos.
¿Podemos detectar tales ondas de gravedad en las partes inferiores de la atmósfera? Este eclipse puede ayudarnos a responder esa pregunta a través del Proyecto Nacional de Vuelos en Globo Eclipse, llevados adelante por equipos ubicados desde Texas hasta Nueva Inglaterra dentro de la trayectoria de la totalidad, que buscarán comparar sus datos con otros grupos que buscarán ver el impacto del eclipse en nuestra atmósfera.
Un eclipse más largo y más espectacular
“El eclipse total de Sol del próximo lunes 8 de abril será visible en los 3 países de América del Norte. La sombra lunar incidiendo en nuestro planeta recorrerá una franja a lo largo de miles de kilómetros con un ancho de varios kilómetros, atravesando dicho continente en dirección y sentido suroeste-noreste. Todos aquellos ubicados en dicha franja podrán disfrutar de uno de los espectáculos más preciosos de la naturaleza”, explicó a Infobae el astrónomo Diego Bagú.
El camino de la totalidad, donde los espectadores pueden ver la Luna bloquear totalmente al Sol, revelando la atmósfera exterior de la estrella, llamada corona, es mucho más amplio durante el próximo eclipse solar total que durante el eclipse que vivió Estados Unidos en 2017.
“Ese eclipse, a diferencia del de 2017 recorrerá un camino de totalidad (donde el día se hace de noche) que podrá ser visto por el doble de la población que el ocurrido hace 7 años. Unas 31 millones de personas viven en las grandes ciudades donde pasará el eclipse y muchos millones más se esperan que se acercarán a observarlo. Además, como la Luna está más cerca de la Tierra, el eclipse durará más tiempo, casi el doble del de 2017″, precisó la experta de la NASA.
En 2017, el camino de la totalidad tenía entre 100 y 114 kilómetros de ancho. Durante el eclipse de mañana, el recorrido sobre América del Norte tendrá un ancho de entre 173 y 196 kilómetros, según cálculos de la NASA, lo que significa que en un momento dado, este eclipse cubrirá más terreno.
La trayectoria del eclipse de 2024 también pasará por más ciudades y áreas densamente pobladas que la trayectoria de 2017. Esto hará que sea más fácil para más personas ver la totalidad. Se estima que 31,6 millones de personas viven en el camino de la totalidad este año, en comparación con 12 millones en 2017. Otros 150 millones de personas viven dentro de 200 millas del camino de la totalidad.
Mayor tiempo en totalidad
En abril, la totalidad durará más que en 2017. Hace siete años, el período de totalidad más largo se experimentó cerca de Carbondale, Illinois, con 2 minutos y 42 segundos.
Para el próximo eclipse, la totalidad durará hasta 4 minutos, 28 segundos, en un área situada a unos 25 minutos al noroeste de Torreón, México. Cuando el eclipse ingrese a Texas, la totalidad durará aproximadamente 4 minutos y 26 segundos en el centro de la trayectoria del mismo.
Las duraciones superiores a 4 minutos se extienden hasta el norte de Economy, Indiana. Incluso cuando el eclipse salga de EEUU y entre en Canadá, el eclipse durará hasta 3 minutos y 21 segundos.