El consumo excesivo de grasas saturadas y trans está asociado a enfermedades que pueden provocar consecuencias a mediano y largo plazo al organismo, informó Ramón Borbón Larios, coordinador de la Clínica Integral de Nutrición de la Secretaría de Salud (SSA).
El experto explicó que, aunque en Sonora se tiene una gastronomía alta en grasas, con el consumo moderado y una adecuada preparación de los alimentos, es posible reducir los efectos dañinos en la salud.
“El esquema nutricional que tratamos de explicarle a los pacientes es, primeramente, no satanizando al alimento, sino simplemente saber bien las cantidades que deben de consumir, como también la preparación de los alimentos para que estén lo menos posible transformados y que tengan calorías que realmente están nutriendo al cuerpo. Un ejemplo negativo en la alimentación es reutilizar el aceite de cocina varias veces, porque ese alimento es transformado completamente y puede llegar a ser nocivo”, recalcó.
Borbón Larios dijo que dentro de las afectaciones por el consumo excesivo de grasas saturadas y trans está la elevación del colesterol, triglicéridos, lipidemias (niveles de grasa elevados en la sangre) y otras enfermedades como diabetes e hipertensión.
Ante esto, el experto en nutrición recomendó cuidar la alimentación y consultar con profesionales de la salud. Para una atención multidisciplinaria está disponible al público la Clínica Integral de Nutrición, ubicada en el Centro Avanzado de Atención Primaria a la Salud (Caaps) en Hermosillo; para agendar una cita, comunicarse al 6621944007.