La Asamblea General de la ONU convocó a una Sesión Especial de Emergencia sobre el conflicto entre Israel y Palestina que dura décadas y mientras la crisis actual en Gaza no muestra signos de disminuir.
Los miembros rechazaron dos enmiendas que hacían referencia específica al grupo extremista Hamás, con 153 países apoyando el proyecto de resolución, 10 en contra y 23 abstenciones.
La resolución exige un “alto el fuego humanitario inmediato”, la liberación inmediata e incondicional de todos los rehenes y “garantizar el acceso humanitario”.
Al declarar abierta de nuevo la 10ª Sesión Especial de Emergencia, el presidente de la Asamblea subrayó la urgencia de poner fin al sufrimiento de civiles inocentes y reiteró la exigencia de un alto el fuego humanitario inmediato.
El presidente de la Asamblea General, Dennis Francis, sostuvo que en estos momentos se está produciendo “una embestida contra civiles, la ruptura de los sistemas humanitarios y una profunda falta de respeto por el derecho internacional y el derecho internacional humanitario” por parte de los combatientes.
“Casi el 70% de los muertos son mujeres y niños”, añadió, insistiendo en que la ONU debe poner fin de inmediato al sufrimiento de los civiles. “Ya es hora de un alto el fuego humanitario inmediato”.
Presentado por Egipto, el proyecto de resolución fue copatrocinado por Arabia Saudí, Argelia, Bahréin, Comoras, Yibuti, Egipto, Emiratos Árabes Unidos, Irak, Jordania, Kuwait, Líbano, Libia, Marruecos, Mauritania, Omán, Qatar, Somalia, Sudán, Túnez, Yemen y el Estado de Palestina.
Además, Austria y Estados Unidos presentaron enmiendas, las cuales no fueron aprobadas
A diferencia de las resoluciones del Consejo de Seguridad, las resoluciones de la Asamblea General no son jurídicamente vinculantes. Pero los mensajes de la asamblea son importantes barómetros de la opinión mundial.
El apoyo fue mayor que el de una resolución del 27 de octubre que pedía una “tregua humanitaria” que condujera a un cese de hostilidades, donde la votación fue de 120 a 14 y 45 abstenciones.
Según analistas, el resultado de esta votación refleja el creciente aislamiento de Estados Unidos, que se rehúsa a sumarse a las exigencias de un alto el fuego.
Además, Estados Unidos es considerado como la única entidad capaz de persuadir a Israel para que acepte un cese del fuego debido a que es su aliado más cercano y su principal proveedor de arsenal.
El texto toma nota de una carta del director del Comisionado General de la Agencia de la ONU para los Refugiados Palestinos (UNRWA), Philippe Lazzarini, en la que advierte que la principal plataforma de asistencia humanitaria para más de 2.2 millones de personas en la Franja está “al borde del colapso”.
El proyecto también hace referencia a resoluciones anteriores relativas a la cuestión de Palestina, así como a las resoluciones pertinentes del Consejo de Seguridad sobre el tema.
También autoriza al presidente de la Asamblea General a reanudar la sesión extraordinaria de emergencia, tras su aplazamiento temporal al término de las últimas deliberaciones.
Los puntos clave en común, incluyen un alto el fuego humanitario inmediato; la exigencia de que todas las partes cumplan con sus obligaciones en virtud del derecho internacional, especialmente en lo que respecta a la protección de los civiles; y la exigencia de la liberación inmediata e incondicional de todos los rehenes, así como la garantía de acceso humanitario.